El ozono es un potente oxidante que puede ser efectivo para eliminar hongos en ambientes interiores. Los hongos pueden crecer en ambientes húmedos y poco ventilados, y pueden ser un problema en el hogar y en espacios comerciales.
El ozono puede ser utilizado para eliminar los hongos y esporas que pueden estar presentes en el aire y en superficies. El ozono es capaz de penetrar en los poros y las grietas de las superficies, y puede destruir las esporas de hongos que se encuentran en ellas.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que el ozono no es un tratamiento específico para los hongos y no puede eliminar las raíces o el micelio de los hongos que pueden estar presentes en la superficie. Para tratar una infestación de hongos en una superficie, es necesario eliminar el exceso de humedad y tratar la superficie con fungicidas específicos.
Además, es importante utilizar el ozono con precaución y seguir las recomendaciones del fabricante para evitar riesgos para la salud y asegurar su eficacia. Es importante tener en cuenta que el ozono puede ser perjudicial para la salud si se inhala en grandes cantidades, por lo que es importante no exceder los niveles recomendados de ozono en el ambiente.